viernes, 21 de noviembre de 2008

Y ha pasado el tiempo...

Hola de nuevo a todos. Ya, ya lo sé, he tenido esto muy dejado de la mano del destino, pero aquí estamos de nuevo todos para hablarles de nustras pequeñas correrías.
A ver, empecemos por N, que sé que lo estaban esperando. Pues bien, como ya les expliqué hace algunos posts me dí cuenta que teníamos en clase una pequeña tirana y en este tiempo ha quedado más que demostrado. Antes, mami llegaba con N hasta la puerta de la clase, y entre que se despedían, N le empezaba a llorar y se aferraba firmemente de sus brazos y la convencíamos para que entrara, se podía pasar una hora, si no más. Hasta que un día, hablando con mami, quedamos en que este espacio de tiempo había que cortarlo, a partir de ese día lo que haríamos sería: ella llegaría con N, le daría un beso y en seguida la cogería yo y la metía en clase, aunque llorara, pataleara, hiciera lo que hiciera, ya me encargaría yo de limpiar vómitos y cambiarme si me "salpicaba" algo. Pues bien, pasado el tiempo, sigue llorando, chantajea a la madre emocionalmente pidiéndole "Espérame ahí fuera" y la madre, por supuesto, caso omiso a las exigencias de N. Y menos mal, porque la verdad que en ocasiones gasta un poco. Pero luego, a la muy cretina, se le pasa todo en cuanto se sienta, porque hemos hecho ese trato: "si no dejas de llorar yo no te hago caso, te quedas sentadita y cuando se te pase vienes a buscarme". Y así ha pasado el tiempo.
Sigamos con S y con G. Ya leen, al menos he conseguido eso, despacio pero leen, y solos. Lo único que me falta es conseguir que entiendan a la primera sin yo tener que decirles veinte veces a lo largo de día "Lee bien". Puede llegar a ser agotador, pero bueno, para cabezotas ellos doble cabezota yo. Tienen sus días de trabajar mejor o peor, lo cierto es que tuve que sentarlos por separado, pero aún así hablan y hablan y hablan y hablan.... Es que no hay día que no los mande a callar. Voy a llevar la cuenta y en otra ocasión les digo las veces que tengo que repetir "Trabaja en silencio" o "vírate hacia delante" o "Que se callen" (esta última empieza a sonar a partir de las 11 de la mañana, cuando la paciencia está llegando a su límite).
Ahora, y me refiero a todos, les ha dado por columpiarse en la silla ¡Horror! A ver cómo les quito la manía porque no hay manera: cuando no están distraídos con cualquier cosa están columpiándose para hablar con el de atrás. Si es que cuando cogen una manía no hay manera... La más experta de todos es A, no pasan 5 minutos y ya está a caballo en su silla hablando con T. Vaya chiquilla para concentrarse, está en las nubes. Pero es normal, ya llevo dos años observándola y me he dado cuenta de lo siguiente: A es del año 2000, acaba de cumplir 8 años, y está en 3º, con lo que está ligeramente adelantada y eso se le nota en la maduración de la niña. A partir de abril, más o menos, se le nota que madura y es como si se le encendiera un chip nuevo y entonces empieza a entender todo lo que no ha interiorizado a lo largo del curso. Así que este año veré a ciencia cierta si mi teoría es correcta y mientras tanto a ver cómo me las apaño para que se centre un poco más y aprenda algo de aquí a abril. En abril ya se me complicará más la cosa.
También he desarrollado mucho la creatividad para hacer que estos chicos se aprendan las tablas de multiplicar. En principio se las hacía estudiar a cada uno a su ritmo, pero no fue buena idea. Y aunque G y S estén en segundo y las multiplicaciones no se ven hasta final del 2º trimestre, principio del 3º, ya se las estoy haciendo estudiar y más adelante aprenderán de dónde salen las multiplicaciones. En primer lugar juego con un gran aliado si se sabe como usarlo: la competitividad entre ellos. Lo primero es lo que siempre ha funcionado: cantar las tablas en voz alta todos juntos y luego por separado. En segundo lugar, hacer campeonatos y darle puntos al que más aciertos tenga, por supuesto el que m´s puntos tenga gana un premio. En tercer lugar, la "comba" es una gran aliada. Es preferible perder media hora de clase jugando a saltar la comba mientras se recitan las tablas que estar toda un mañana haciéndoselas memorizar. Además comprobado. Y mientras yo con una contractura en la musculatura del omóplato y en el hombro de tanto darle a la cuerda. Pero bien merece la pena.
Y como llevo casi una semana intentando escribir esta entrada, creo que la colgaré hoy y en estos días intento escribir otra, pero no aseguro nada porque estamos en la "Semana de Evaluación" y eso signifia corregir libretas, organizar tareas para Navidad, que no se crean que por estar de vacaciones no van a hacer nada que hay mucho por hacer y además de eso, una de las partes más trabajosas de la secretaría como la gestión oconómica del centro, analizar los resultados del trimestre etc etc etc.
Así que con esto y entre papeles....