"...nacen las flores más bonitas" ¡Ole, ole y ole! Ese fue el piropo que me dedicaron el viernes, cuando salía de la panadería, unos chicos de secundaria. ¿Quién dijo que la educación no estaba dando resultados? Bien si se lo sabía como si se lo inventó sobre la marcha, este chico se merece un aprobado en desparpajo. Eso sí, me alegró la tarde y lo que ya había pasado de semana ¡jajajaja!
Bueno, vamos a lo que vamos. El viernes fue un día un tanto distinto para N. "Llegó una chica, que no conocía de nada y de repente, la maestra, a quién me estoy recién acostumbrando, me dice que ahora esa chica es la que manda cuando llega. ¡Esta mujer me tiene loca!" O eso creo yo que habrá pensado N cuando le presenté a la profe de Música, que de ahora en adelante y siguiendo mi línea la llamaremos Música (sí, me devané los sesos para ponerle nombre). Pues como les iba diciendo... El viernes sólo estábamos N y yo en clase cuando llegó Música. En lo que llegaban los demás, que por cierto las sábanas los tenían atrapados, presenté a Música y a N:
- Mira N, esta es Música. Ella es la profe de música y cuando está ella manda ella en clase y todos le hacemos caso. Yo estoy callada cuando ella está hablando porque dice cosas importantes. Ahora cuando lleguen los demás bajamos con ella a la otra clase.
- ¿Y yo también? - preguntó N.
- Sí, tú también.
- ¿Y tú?
- Yo también pero yo voy a estar en una esquina, yo no mando en la clase de música, le tienes que hacer caso a Música.
En esto fue llegando el resto de compañeros y Música le ofreció a N que le cogiera la mano. Por supuesto la primera reacción de N fue esconderse detrás de mí pero yo le recordé que yo no mandaba y que tenía que hacerle caso a Música. Me miró, miró a Música y se acercó para cogerle la mano como dicendo..."no me queda otra, total, si me pongo a llorar no me van a hacer caso..." Y todos juntos fuimos a clase. El resto del día fue con casi total normalidad. Lo único es que los grandes están muy despistados, T por ejemplo se quejaba que estaba todo el día castigada sin recreo, cosa normal, porque si no hace el trabajo que debe hacer en el tiempo que le pongo luego ocupamos tiempo de juego en trabajar. Cosas de la vida.
Es cierto que debo hablar con ellos otra vez. Hoy por ejemplo lo dije en la reunión que tuve con las madres: Hay que hacerlos responsables de su material y sus cosas, crearles unas disciplinas de trabajo y ayudarles a conseguir sus objetivos que ellos mismos se marcaron, no se pueden desentender de sus responsabilidades.
Y básicamente hoy hicimos más de lo mismo: repasar las sumas y restas que aún tienen fallos. Yo no sé cómo resetean tan rápido, ¡a mí me cuesta olvidarme de algo que hago todos los días! Aunque reconozco que soy muy despistada y lo mejor que me va es la memoria fotográfica porque de resto... carezco de cualquier otra.
Y con esto y con flores....
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